Jugar a Simón dice

Indíquenles a sus hijos una postura o acción que realizar. Luego deben quedarse quietos y callados hasta que les indiquen otra cosa. “Simón dice: tócate la cabeza…Simón dice: pisa fuerte”. Luego de que comprendan el juego, déjenlos ser Simón.

Alienten a sus hijos a hacer predicciones. “Me pregunto qué pasará si mezclas la pintura roja y la verde”. Pueden recordarles un momento en que hayan hecho algo similar. Luego vean si sus predicciones son acertadas.

Vean si sus hijos pueden pensar en diferentes formas de resolver un problema. Cuando un juguete se rompe, pueden jugar al doctor y enviarlo al hospital o pueden elegir otro juguete para jugar.

Ayuden a su hijo a contar grupos de objetos que sean un poco más grandes que los números que conocen bien.

Elijan un evento próximo que sea divertido para su hijo, como la visita a un abuelo. Cuenten los días que faltan y reúnan un elemento pequeño por cada día. Si faltan 6 días, coloquen 6 monedas sobre la mesa.

¡Cuenten y encuentren números en su vecindario! Podrían contar los cuadrados de la acera o buscar números en los letreros.

Vayan afuera y hablen acerca de cómo los objetos pueden clasificarse en categorías. Observen cuántas hojas o flores diferentes pueden encontrar sus hijos. Señalen aquellas que puedan no ser obvias. “Mira ese tulipán. Tiene pétalos rosa y un tallo largo”.

Relacionen y clasifiquen objetos por sus características, como el color, la forma, el tamaño o lo que hacen. Por ejemplo, su hijo puede ayudar a clasificar los cubiertos cuando los guarde.

Fabriquen un rompecabezas (pueden hacer un dibujo y cortarlo en algunas partes). Si su hijo necesita ayuda, bríndenle pistas con palabras como “abajo” o “arriba”.

Hagan una búsqueda del tesoro de rectángulos alrededor de su casa. Hablen acerca de qué objetos no son rectángulos y por qué. “Ese bloque no es un rectángulo porque solo tiene 3 lados”.